Sevilla, 20 jun (EFE).- El exjugador internacional Luis del Sol, un mito salido de la cantera del Real Betis y que también jugó en el Real Madrid, Juventus de Turín y Roma, falleció este domingo a los 86 años en Sevilla.
Del Sol, nacido el 6 de abril de 1935 en Arcos de Jalón (Soria), aunque bautizado y afincado en el barrio sevillano de San Jerónimo por la condición de ferroviario de su padre, está considerado el mejor jugador surgido de la cantera del Betis y era muy querido y admirado por su afición, que ha honrado su memoria con numerosos mensajes en las redes sociales.
Internacional en 16 ocasiones y campeón de la Eurocopa de 1964 con España, este fino y potente centrocampista, que empezó jugando de extremo y luego como interior, llegó al Betis como juvenil y, tras su debut en la campaña 1954-55 con el primer equipo -entonces en Segunda-, estuvo seis en total antes de fichar en 1960 por el Real Madrid.
En el club merengue ganó una Copa de Europa, una Intercontinental, dos Ligas y una Copa del Generalísimo junto a Alfredo di Stéfano, hasta su traspaso en 1962 al Juventus por 35 millones de pesetas, dinero que costeó ciudad deportiva blanca.
Luis del Sol reinó en Italia, de 1962 a 1970 en la Juventus y de 1970 a 1972 en la Roma, y fue apodado 'Settepulmoni' (Siete Pulmones) por su gran poderío físico y futbolístico, aunque con el tiempo también fue bautizado como 'Il postino' o cartero de lujo por su enorme capacidad para subir balones de área a área y servirlos a sus compañeros.
Tras convertirse en un ídolo en la Juve y brillar también en el Roma, este soriano y sevillano de adopción regresó al Betis para jugar una campaña más, antes de su retirada en la 1972-1973. En total, disputó 190 partidos oficiales con la camiseta verdiblanca y anotó 45 goles.
No obstante, ese citado año no fue el último servicio de Luis del Sol al club de su vida.
Así, fue entrenador del primer equipo en 1986 y en la temporada 2000-01, labor que culminó con el ascenso del Betis a Primera en Jaén; también ejerció de secretario técnico en distintas épocas; y, como ejemplo del cariño y de la admiración que le tiene el beticismo, la ciudad deportiva del club lleva su nombre desde 2010.
FUENTE: Agencia EFE