San Sebastián, 15 ene (EFE).- La Real Sociedad ha cerrado una mala primera vuelta, con su entrenador, Eusebio Sacristán cuestionado, tras sumar sólo dos triunfos en las diez últimas jornadas, haber sido eliminada de la Copa y no encontrar alternativas a un juego que ya no ofrece resultados.
Si los donostiarras acotaran los resultados a sus diez últimos compromisos en todas las competiciones, el saldo todavía sería más desfavorable porque entre Liga Europa, Copa y Liga, únicamente suman el triunfo ante el Sevilla en un rango de diez partidos.
La Real ha dejado escapar puntos en partidos a priori propicios para sus intereses, como ante Las Palmas (2-2), Málaga (0-2) y Leganés (1-0), además de sucumbir en San Sebastián en Copa ante el Lleida (2-3) y dejar escapar con otra derrota en Anoeta la opción de ser primera de grupo en Liga Europa ante el Zenit (1-3).
La comparativa con el año pasado no admite discusión, los blanquiazules afrontaron la segunda vuelta con 35 puntos, 12 más que ahora, pero la actual no es de las peores cifras de los vascos tras su ascenso en 2010, ya que hace dos años sólo tenían 20 puntos en la primera vuelta y hace tres temporadas 19.
El balance de esta media parte de la presente campaña también tiene argumentos positivos como la irrupción y la consolidación de jugadores de cantera, uno de los grandes éxitos de Eusebio que ayer ante el Barcelona contó con jóvenes valores como Álvaro Odriozola, Kevin Rodrigues, Mikel Oyarzabal o Igor Zubeldia para plantar cara al líder la Liga, algo que hizo durante 70 minutos.
Ahora el equipo vasco tendrá que trabajar para recuperar sensaciones y pelear por algún objetivo ilusionante que no sea deambular en la tierra de nadie en la que ahora se encuentra, a siete puntos del descenso y a seis de Europa.