Chicago (EEUU), 30 oct (EFE).- El cerrador cubano Aroldis Chapman trabajó las dos últimas entradas y dos tercios y con su calidad de serpentina contuvo el ataque enemigo para preservar el triunfo de los Cachorros de Chicago por 3-2 sobre los Indios de Cleveland.
El sexto duelo se llevará a cabo el martes en el campo de los Indios, a quienes una sola victoria los hará campeones.
Pero los Cachorros están tratando de convertirse en el primer equipo en remontar una desventaja en Serie Mundial de 1-3 desde que los Reales de Kansas City lo lograron en 1985, y el primero en conseguir el título fuera de su campo desde que lo hicieron los Piratas de Pittsburgh en 1979.
Mientras que los Indios buscan su primer título de campeones desde 1948, que sería su tercero en total y el segundo en su campo desde el que ganaron en 1920.
Chapman (1) logró poner en pie a los 47.711 asistentes al "Wrigley Field" con sus serpentina que alcanzó velocidades de 100 millas por hora.
El cubano, que lanzó los últimos dos episodios y dos tercios, preservó la ventaja de los Cachorros, al aceptar un imparable y sacar a cuatro enemigos por la vía del ponche.
El serpentinero de Cuba no había lanzado a partir del séptimo episodio desde el 2012, y logró ponchar al peligroso antesalista dominicano de los Indios, José Ramírez (1), que ya había conectado cuadrangular.
Chapman subió al montículo cuando había un corredor en segunda y apenas un out, pero disipó la potencial carrera y el peligro en la séptima entrada al igual que en la octava, y en la novena lanzó a la cuenta de 1-2-3.
El cerrador cubano trabajó contra 10 enemigos, a quienes dominó con 42 disparos, de los cuales 26 fueron a la zona del strike, y ayudó a que los Cachorros se hicieran de su primer triunfo en partido de Serie Mundial en el "Wrigley Field" desde el sexto partido del Clásico de Otoño de 1945.
El abridor zurdo Jon Lester (1-1) subió al montículo cuando al equipo de Chicago le quedaban pocas esperanzas de continuar con vida en la Serie Mundial, pero con sólido trabajo de seis episodios se apuntó el triunfo.
El abridor de los Cachorros lanzó seis entradas, permitió cuatro imparables, un jonrón y dos carreras y retiró a cinco enemigos por la vía del ponche para acreditarse la victoria.
Lester tuvo el apoyo del relevo Carl Edwards Jr. y después de la bola magistral de Chapman.
La batería de los Cachorros tuvo la chispa del receptor David Ross, que pegó volado de sacrificio en la parte baja del cuarto episodio, empujó la carrera de la diferencia y coronó racimo de las tres anotaciones de su novena.
El antesalista Kris Bryant (1) se encargó de iniciar el racimo letal contra los Indios al conectar batazo de cuatro esquinas contra el abridor Trevor Bauer, sin corredores en el camino ni outs en la entrada.
Le siguió el parador en corto Addison Russell que pegó al cuadro y el primera base Anthony Rizzo llegó a la timbradora.
Mientras que Ross se encargó de cerrar la cuenta y poner números finales a la pizarra de los Cachorros.
La batería latinoamericana de los Cachorros la representó el segunda base puertorriqueño Javier Báez, que conectó un imparable al viajar cuatro veces a la caja de bateo.
Por los Indios, Ramírez (1) respondió con batazo de vuelta entera en el segundo episodio al conectar contra los servicios de Lester.
Ramírez, que pegó una vez en cuatro viajes a la caja de bateo, remolcó una carrera y anotó una con su cuandrangular cuando Lester sumaba dos outs en el episodio.
El parador en corto puertorriqueño Francisco Lindor pegó sencillo al jardín central en el sexto episodio mandando a la timbradora al guardabosques Rajai Davis con la segunda carrera de los Indios.
La derrota fue para Bauer (0-2) en cuatro entradas, permitió seis imparables, un jonrón y tres carreras, y retiró a siete enemigos por la vía del ponche.
El sexto partido de la serie se llevará a cabo en Cleveland el martes por la noche, cuando el abridor derecho de origen puertorriqueño de los Cachorros, Jake Arrieta, ganador del primer triunfo de su novena, suba a la lomita a enfrentar a Josh Tomlin, de los Indios.