Redacción Deportes, 28 ene (EFE).- El suizo Roger Federer venció al croata Marin Cilic, por 6-2, 6-7 (5), 6-3, 3-6 y 6-1, en tres horas y tres minutos para ganar por sexta vez el Abierto de Australia, y levantar después la Copa Norman Brookes entre lágrimas, celebrando su vigésimo título del Grand Slam.
Con la victoria de este domingo en la Rod Laver Arena, Federer, defensor del título, iguala los seis títulos del serbio Novak Djokovic en Melbourne Park, y del australiano Roy Emerson, y amplía su palmarés con el 96 de su cuenta.
Este nuevo título, el segundo esta temporada tras el logrado en Perth con su país, en la Copa Hopman, mantiene al suizo como segundo jugador en la lista ATP de este lunes, pero a tan solo 115 puntos del español Rafael Nadal.
Por segundo año consecutivo, Federer necesitó cinco sets para coronarse campeón en el primer grande de la temporada, en una final que sorpresivamente se disputó con el techo cubierto de la central, porque la organización del torneo así lo decidió al aplicar el índice WBGT, que combina factores como la humedad, el viento y la radiación solar, que superó el límite de 32,5 grados.
Veinticuatro horas después de la gran final femenina entre la danesa Caroline Wozniacki y la rumana Simona Halep, Federer y Cilic brindaron otro gran partido como colofón de este torneo, en el que el suizo ha puesto distancia de nuevo en cuanto a los grandes, y ya supera en cuatro a Rafael Nadal, con 16, a Pete Sampras, con 14, y a Roy Emerson y Novak Djokovic con 12.
De nuevo volvió a sufrir Federer, que quería ganar el torneo por segunda vez sin ceder un solo set, como lo logró en 2007 y como también hizo en Wimbledon el año pasado, y que salvó una situación conflictiva en el comienzo del quinto set, cuando Cilic lanzado y demoledor con su derecha tras ganar el cuarto set, tuvo una bola de rotura en el comienzo del definitivo.
El suizo salvó la situación y a continuación rompió a su rival, para poner luego más distancia en el marcador con 3-0, y jugar a placer ante Cilic, que al final ha sido el único jugador que este año ha logrado arrebatar a Federer, no solo un set, sino dos.
Bjorn Borg (Wimbledon 1976 y 1978 y Roland Garros 1980) y Nadal (Roland Garros 2008, 2010 y 2017) seguirán siendo, de momento, los únicos que han ganado tres torneos de Grand Slam sin ceder un set.
Cilic, que aparecerá este lunes como tercer jugador del mundo, y que quería convertirse en el primer jugador en ganar el Abierto de Australia en su debut desde el suizo Stan Wawrinka en 2014, no pudo vengar su derrota el pasado año en Wimbledon, cuando disputó la final perjudicado por ampollas en los pies.
El croata acabó con 16 saques directos, lejos de los 24 de Federer, aunque con uno de ellos marcó los 214 kilómetros por hora, y cedió su saque en seis ocasiones. Solo pudo romper al suizo dos veces. El de Basilea acabó ganando 152 puntos, por 128 de Cilic.
Los aficionados que llenaron la Rod Laver Arena, entre ellos la actriz española Elsa Pataky, y su marido el actor australiano, Chris Hemsworth, disfrutaron de una gran final, en la que Federer volvió a levantar la copa Norma Brookes por sexta vez, emocionado y llorando al convertirse, con 36 años y 173 días, en el tercer jugador en ganar cuatro o más Grand Slam después de pasar la treintena (Rod Laver y Ken Rosewall.
Todos los aficionados que llenaron la Rod Laver aplaudieron en pié a Federer, que sin poder contener la emoción, agradeció al público su devoción. En su caso es el tercer 'major' que gana después de cumplir 35 años, haciendo historia de nuevo.