Así, los dirigidos por Tom Thibodeau toman una ventaja de 2-0 antes de regresar al Madison Square Garden.
Tal como ocurrió en el primer juego, los Celtics de Joe Mazulla no lograron sostener su rendimiento durante todo el encuentro. Aunque hicieron ajustes y dominaron la primera mitad, repitieron errores en momentos clave, lo que les costó el partido.
A pesar del destacado desempeño de Derrick White y Jaylen Brown, ambos con 20 puntos, la escuadra de Boston dejó escapar una oportunidad crucial.
Por parte de los Knicks, Josh Hart y Karl-Anthony Towns lideraron la ofensiva, mientras que Jalen Brunson fue bien contenido por Jrue Holiday. No obstante, New York supo aprovechar su momento y contó nuevamente con la destacada actuación de Mikal Bridges, quien se ha convertido en la sensación de la serie.
El panorama para Boston es preocupante. Aunque eliminaron sin complicaciones a Orlando en la primera ronda, ahora enfrentan a un rival ofensivamente más potente. La presión de dos remontadas consecutivas sufridas ha expuesto una notable diferencia con respecto al equipo que conquistó el título la temporada pasada.
Por su parte, los Knicks comienzan a ilusionarse con llegar a las Finales de Conferencia o incluso soñar con una Final de la NBA. Para ello, deberán defender su localía en Nueva York, donde buscarán confirmar la ventaja conseguida y sentenciar la serie. Brunson, Bridges y Towns serán claves para mantener viva esta histórica esperanza.
Por: Rodolfo Mendoza