Jasper Philipsen, del equipo Alpecin-Deceuninck, se coronó como el dominador del primer sprint del Tour de Francia en la ciudad de Bayona. Tras un excelente lanzamiento por parte de Mathieu van der Poel, Philipsen remató la victoria por delante de Phil Bauhaus y Caleb Ewan, consolidándose como el velocista de referencia en esta edición de la ronda gala. Mientras tanto, Adam Yates, del UAE Team Emirates, se mantiene firme como líder en la clasificación general.
El belga contó con la ayuda de Mathieu van der Poel, quien realizó un espectacular lanzamiento para dejarlo en la posición ideal, enfilado hacia la victoria, a tan solo 250 metros de la meta. Aunque Wout van Aert, del Jumbo-Visma, intentó disputarle la victoria a pesar de estar herido por su caída en la etapa anterior, se vio atrapado entre las vallas y finalizó en quinta posición. Van Aert protestó alegando una maniobra irregular de su compatriota en el sprint, pero tras revisar la situación, los jueces determinaron que no había lugar a sanciones para Philipsen.
Ni Phil Bauhaus, del Bahrain Victorious, ni Caleb Ewan, del Lotto Dstny, lograron superar al belga, quedando en segunda y tercera posición respectivamente en la meta de Bayona. Philipsen, favorito para conquistar el maillot verde, suma así su primera victoria en este Tour, la séptima de la temporada y la trigésima en su carrera profesional a los 25 años, acercándose en la clasificación por puntos al líder del maillot verde, Victor Lafay, de Cofidis, ambos con 80 puntos.
En cuanto a la clasificación general, no hubo cambios en los primeros puestos, con el británico Adam Yates manteniendo el maillot amarillo del UAE Team Emirates, seguido de cerca por su compañero Tadej Pogacar y su hermano Simon, del Team Jayco AlUla, a tan solo seis segundos. En sexta posición, a 17 segundos, se encuentra Jonas Vingegaard, del Jumbo-Visma, mientras que los españoles Carlos Rodriguez, del INEOS, y Mikel Landa, del Bahrain, se sitúan en el top-10, ocupando el noveno y undécimo lugar respectivamente, a 22 segundos del líder.
Después de dos días de intensas batallas en territorio vasco, la tercera etapa resultó más tranquila y se desarrolló según lo esperado, con los velocistas tomando protagonismo. Tras un ataque inicial de Neilson Powless, líder de la Montaña y el más combativo hasta ahora en el Tour, y el francés Laurent Pichon, se formó una escapada de solo dos corredores fácilmente controlable por el pelotón. Powless aseguró su liderato en la Montaña al pasar en cabeza por los cuatro puertos en los primeros 102 km de etapa, antes de adentrarse en Francia.
Una vez logrado su objetivo, el ciclista estadounidense decidió regresar al pelotón y reservar energías para futuras batallas. Pichon continuó en solitario, recibiendo el aplauso de su equipo a través de la radio. Cerca de entrar en Francia por Hendaya, a 58 km de la meta, el ritmo se aceleró y los equipos de los velocistas tomaron la iniciativa. Finalmente, el pelotón alcanzó a Pichon a 37 km de meta, en San Juan de Luz, después de su destacado esfuerzo.
Con el pelotón volando y la tensión en aumento, la etapa se dirigió hacia el esperado sprint en Bayona, confirmando a Jasper Philipsen como el velocista a seguir en el Tour de Francia. Mañana, en la cuarta etapa de 181.8 km entre Dax y Nogaro, los sprinters tendrán una nueva oportunidad antes de adentrarse en las jornadas pirenaicas que se espera que marquen las primeras diferencias significativas en la clasificación general.