Houston (EEUU), 24 oct (EFE).- El alero estrella LeBron James y los Cavaliers de Cleveland llegan por primera vez en su historia al inicio de una nueva temporada con la responsabilidad de defender el reinado de campeones de la NBA y lo tendrán que hacer frente al equipo que destronaron, los Warriors de Golden State, que vuelven en plan de venganza tras reforzarse con el alero estrella Kevin Durant.
Aunque es una gesta irrepetible, el astro de los Cavaliers y sus compañeros no piensan que ya han cumplido, sino todo lo contrario están hambrientos de más triunfos y plenos de ambiciones.
De ahí que nada mejor que comenzar la nueva temporada a partir del martes con una victoria cuando se enfrenten en el partido inaugural a los Knicks de Nueva York en el Quicken Loans, de Cleveland, donde vivirán una noche especial con la entrega de los anillos de campeones.
"Seguimos con hambre", declaró James, quien a sus 31 años se mantiene como el jugador más completo de la NBA. "No nos damos por satisfechos con lo logrado y debemos comenzar la temporada con un triunfo".
Triple campeón de la NBA, James, logró dos títulos con los Heat de Miami, reconoció que quiere emular al legendario Michael Jordan y sus seis títulos de liga.
Por su parte el entrenador de los Cavaliers, Tyronn Lue, que como interino y novato ganó el título, reconoce que ahora el equipo, que mantiene el núcleo del año pasado, jugará con menos presión al tener ya en su poder un anillo de campeones.
La primera prueba de fuego la van a tener los Cavaliers ante el joven equipo de los Knicks, dirigidos por el nuevo entrenador Jeff Hornacek, que espera conseguir la reconstrucción del equipo que tanto desea el legendario exentrenador Phil Jackson, ahora presidente de operaciones del equipo neoyorquino.
Mientras, los Warriors no se olvidan que antes que llegase el colapso en las pasadas Finales de la NBA tenían una ventaja de 3-1 a su favor y de inmediato analizaron que fue los que le falló.
La respuesta fue clara y determinante para mantener un reinado en la NBA no puedes depender de una sola estrella, tenían al base Stephen Curry, pero las lesiones afectaron su rendimiento en la recta final, y no hubo nadie que pudiese ocupar su liderazgo.
Tenían que fichar a una estrella, la misión no era fácil, pero había como agente libre a una de las mejores de la NBA, Durant.
Cuando todo el mundo apuntaba a que Durant estuviese en equipos que nada tenían que ver con los Warriors, el de Golden State sorprendió con el gran fichaje, que conmocionó a la NBA y los catapultó como los grandes triunfadores por muchos años.
Los Warriors de inmediato, sobre el papel, lucieron y lucen al concluir la pretemporada, incluso más poderosos con Durant, pero su entrenador Steve Kerr advierte que habrá un proceso para que la nueva figura se adapte a un plantel multiestelar.
Kerr no quiere hacer pronósticos sobre la plantilla que posee encabezada por Curry, el Jugador Más Valioso (MVP) de las últimas dos temporada y por Durant.
El resto de los titulares Draymond Green y Klay Thompson, elegidos al Juego de Estrellas, junto con el nuevo pívot, el georgiano Zaza Pachulia es un complemento excepcional, que tendrá como reto para los Warriors llegar a las 74 victorias después de haber establecido la marca de 73 en la pasada liga.
"En la NBA nunca sabes lo que tienes sino hasta que lo ves jugar", advirtió Kerr. "Uno puede creer que sabe lo que tiene. Desde luego, tenemos gran capacidad para anotar puntos con este equipo desde el perímetro. Contamos con tres de los mejores disparadores del mundo, y eso está muy bien. Pero hay muchas cosas más que surgen en un partido".
El joven entrenador de los Warriors reiteró que dentro del deporte no hay garantías de nada, las piezas tienen que acoplarse y su deseo es que el proceso con su equipo todo salga bien.
La primera prueba de fuego la tendrán el martes cuando en su campo del Oracle Arena se enfrenten nada menos que a los nuevos Spurs de San Antonio, que llegan plenos de confianza a pesar de la retirada del legendario pívot Tim Duncan, cuyo puesto ha ocupado el español Pau Gasol, toda una garantía que ha encajado a la perfección dentro del esquema del equipo tejano.
El legendario entrenador de los Spurs, Gregg Popovich, el maestro de Kerr, se mostró muy satisfecho con el rendimiento que ha tenido el equipo en la pretemporada y especialmente de la manera como Gasol se ha integrado al sistema de juego.
"Lo que me hace estar más tranquilo tras perder a Duncan es Pau Gasol", indicó Popovich. "Es un jugador inteligente y lo ha demostrado con buenos equipos".