Por más de 100 muchos el béisbol de Grandes Ligas ha contado con buenos y grandes peloteros, con estrellas, con súper estrellas y por supuesto con figuras que se han vuelto inmortales. Desde que hizo su debut en el 2001, el japonés Ichiro Suzuki demostró que estaba destinado a ser parte de ese último renglón.
Las palabras de Rawitch no fueron más que un mero formalismo pues si había un pelotero de todos los que debutaron en MLB en este Siglo 21 con méritos más que suficientes para pasar a la inmortalidad ese es precisamente Ichiro.
La pregunta era: ¿Sería Ichiro, el segundo pelotero por detrás del panameño Mariano Rivera en conseguir todos los votos de los miembros de la Asociación de Escritores de Béisbol de América (BBWAA por sus siglas en inglés)?
Y es que a lo largo de su carrera de 19 campañas, Ichiro ejemplificó todo lo que un atleta debe tener: gran jugador, dedicado, sobresaliente entre los mejores, buen compañero y además de ello un gran ser humano. ¿Qué más se podría pedir?
Impactó de inmediato en la Liga ganándose el premio de Novato del Año y Jugador Más Valioso en la Liga Americana en su primer año con los Marineros de Seattle. Fue a 10 Juegos de Estrellas. Ganó 10 Guantes de Oro como jardinero. Tuvo 3 Bates de Plata. A ello súmenle que terminó con 3,089 imparables, eso pese a que llegó a las mayores a los 27 años.
Si todas esas estadísticas no pueden convencer a alguien de que un jugador merece estar entre los mejores de la historia, entonces, ¿Qué más se necesita? Que no ganó una Serie Mundial. Ey, este es un deporte en conjunto más no individual. Muchos han conseguido uno no más anillos estando en la banca.
Pero tristemente en el mundo hay gente que siempre quiere buscarle la quinta pata al gato o más bien tirársela de 'hat' para llevarle la contraria a la mayoría. Y en la BBWAA no la excepción pues de las 394 papeletas que se emitieron, uno consideró que Ichiro no merecía entrar a Cooperstown. ¿Cuáles habrán sido sus razones? Por ahora serán desconocidas pero yo solo creo que existen dos formas por las que tu no puedas votar por un jugar de esa estirpe: necedad o simple maldad.
Como panameño y amante del béisbol he sido feliz porque Mariano se convirtió en el primer y hasta ahora único unánime en ingresar a Cooperstown, pero mi pasión por el juego y mi nacionalismo no puede tampoco cegarme a creer que antes de él no existieron otros que lo merecieron.
Todavía resulta increíble como a extraordinarios jugadores como Derek Jeter, Ken Griffey Jr., Tom Seaver, Nolan Ryan o Cal Ripken, por mencionar solo a algunos no hayan conseguido ese 100 % antes que el nuestro pues méritos en el terreno los tenían de sobra.
Superado este trago amargo quedará por esperar en próximas votaciones qué sucederá con grandes figuras que recién se retiraron o están por retirarse como Albert Pujols, Miguel Cabrera o Justin Verlander. Si ninguno de ellos tres consigue el 100 % entonces sí que estas elecciones no tendrían sentido. Ah, y ojalá ese o esa que en esta ocasión no votó por Ichiro ya se ha jubilado de estos menesteres.