La noche en el Maracaná fue una epopeya escrita en celeste y blanco. Argentina, liderada por un gol de Nicolás Otamendi, desafió la historia y venció 1-0 a Brasil, rompiendo un invicto de los pentacampeones como locales en eliminatorias CONMEBOL.
El resultado no solo consolidó a Argentina en la cima de las Eliminatorias, sino que marcó un hito al cerrar el año con 15 puntos de 18 posibles, una gesta que se celebró en el campo y en las gradas. Sin embargo, la victoria se vio ensombrecida por los incidentes en las tribunas, que obligaron a una pausa en el juego debido a enfrentamientos entre aficionados y la policía.
La figura de Lionel Scaloni, director técnico de la Albiceleste, cobró relevancia tras el encuentro. A pesar del triunfo histórico, Scaloni sorprendió al poner en duda su continuidad al frente del equipo, expresando incertidumbre sobre su futuro en la selección campeona del mundo, "En este tiempo estos jugadores nos han dado un montón y necesito pensar mucho que voy a hacer, no es un adiós ni otra cosa, pero necesito pensar porque la vara está muy alta y está complicado seguir y está complicado seguir ganando. Toca pensar este tiempo, se lo diré al presidente y a los jugadores después, porque esta selección necesita un entrenador que tenga todas las energías posibles y que esté bien", declaró Scaloni ante los medios.
El ambiente tenso del partido, agravado por los conflictos en las gradas, dejó una sensación agridulce en el equipo argentino. La seguridad y la integridad de los jugadores se vieron comprometidas, lo que generó una interrupción temporal en el juego.
Brasil, por su parte, despide un año complicado, ubicándose en sexto lugar con siete puntos en seis partidos. La eliminatoria sudamericana para la Copa del Mundo se reanudará en septiembre de 2024.