Arlington (Texas, EEUU), 16 sep (EFE).- El duelo que el próximo sábado van a protagonizar el púgil mexicano Saúl Canelo Álvarez frente al británico Liam Smith, campeón del peso mediano Junior, de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), ya tiene a un ganador garantizado, que son los organizadores encabezados por la compañía Golden Boy Promotions.
Mientras sus promotores lo protegen del combate contra el kazako Gennady Golovkin, campeón del peso mediano e invicto con 36-0, incluidos 33 pro la vía del nocáut.
Un enfrentamiento entre ambos, para unificar títulos que es lo que quería Golovkin, de 34 años, no es lo que conviene al promotor de Canelo Álvarez, Óscar De La Hoya, que sabe que una derrota de su pupilo como le sucedió ante el estadounidense Floyd Mayweather Jr. le puede costar quedarse sin ganar cientos de millones de dólares.
La mejor demostración de esta realidad es llevar una pelea ante Smith, un campeón de segunda fila, completamente desconocido en Estados Unidos, al AT&T Stadium, de Arlington (Texas), el campo de los Cowboys de Dallas, donde el objetivo de los promotores, incluido el dueño del equipo tejano de la NFL, Jerry Jones, es llegar a la venta de 70.000 entradas, toda una marca.
De ahí que tampoco en la última rueda de prensa que ofrecieron ambos protagonistas a los periodistas no fuesen necesarios ningún tipo de insultos, sino se diesen agradecimientos y se recordarse que la taquilla iba a batir la marca que estableció la pelea anterior que tuvo lugar en el mismo escenario con el filipino Manny Pacquiao de protagonista.
Jones festejó con mucha efusividad que Canelo Álvarez y Smith hayan vendido ya más boletos de lo que logró Pacquiao en sus dos presentaciones en el estadio de su propiedad, que le hace ser el equipo más valioso en el mundo del deporte profesional (4.2000 millones de dólares).
"Desde que adquirí a los Cowboys, desde que construí este estadio, siempre soñé con tener a los campeones aquí. Estoy contento por que esta pelea ha vendido más boletos que ninguna otra para este estadio", destacó Jones.
Por su parte, el campeón mexicano de 26 años, que llega a la pelea con marca de 47-1-1, 33 triunfos por la vía rápida, y va a boxear en la categoría del peso mediano junior, recordó que trabajó para no generar cualquier tipo de sorpresas, sino para darle a los aficionados una gran victoria y provocar el grito de "Viva México" en la estadio de Jerry Jones.
Smith, de 28 años, señaló que el combate le permitirá llegar a la elite del boxeo, lugar que hoy ocupa Canelo, pero que él podría ocupar siempre y cuando le gane el sábado y defienda el titulo de campeón mediano junior de la OMB, que pondrá en juego.
Precisamente, el puertorriqueño Francisco Valcárcel, máximo responsable de la OMB, admitió que siempre anheló ser parte de un evento boxístico como el del sábado en el AT&T Stadium, y además de tener a Canelo Álvarez como protagonista en la lucha por un cinturón de la organización que preside.
Valcárcel entregó a Canelo un cinturón de campeón Latino que ganó hace siete años y no le había entregado desde entonces.
"Esta semana voy a cumplir dos sueños, el primero es ser parte de un evento boxístico en este estadio, y el segundo, tener a Canelo peleando por el cetro de la OMB, aunque no será fácil, Smih no va a estar corriendo, él va a estar frente a frente", aseguró.
El que ya corre de alegría es De La Hoya, la leyenda del boxeo mundial, que reconoció el éxito garantizado de la venta de entradas para ver la pelea, que muy bien podría superar las 70.000.
En cuanto a lo que realmente les interesaba conocer a los verdaderos amantes al deporte del boxeo, el posible duelo entre Canelo Álvarez y Golovkin, la fecha más cercana no será hasta por lo menos dentro de un año.
Eso si, de acuerdo a De La Hoya, que ha sido el que ha impedido que se de el ansiado duelo entre su pupilo y Golovkin, cuando se realice significará "el renacer del deporte del boxeo" tras el hundimiento que sufrió con la decepción que generó el duelo entre Pacquiao y Mayweather Jr.
Pero la misma tendrá que esperar, como sucedió con la de Pacquiao ante Mayweather Jr. que costó un retraso de tres años y cuando se dio el púgil filipino subió al cuadrilátero con una lesión en el hombro derecho, que calló para que al final la pelea se celebrase y generase unos ingresos cercanos a los 600 millones de dólares, la mayor recaudación en la historia del boxeo.
La teoría del máximo responsable de la "Golden Boy Promotions" es que antes que se de el duelo entre Canelo Álvarez y Golovkin, el púgil mexicano tendrá que vender tres peleas más para que los "aficionados vuelvan a creer en el deporte del boxeo".
Al margen de lo que le pueda deparar en el apartado deportivo y si realmente las peleas como las de Canelo Álvarez y Smith van a levantar el nivel del boxeo, lo que De La Hoya si tiene garantizados son decenas de millones de dólares de ingresos económicos.
Los que le van a proporcionar el tener bajo su control al mejor producto comercial que hay dentro del mercado mexicano que siempre da su apoyo total al deporte del boxeo y a la figura del momento, que ahora no es otra que Canelo Álvarez.