¡Increíble! ¡Sorpresivo! ¡Histórico! La Selección "alternativa" de Panamá mantuvo en cero su portería hasta el minuto 78 ante el campeón del mundo, ante el mejor jugador del mundo (Lionel Messi) y ante más de 80 mil almas en el mítico estadio Monumental. El humilde equipo canalero casi le arruina la fiesta a la Argentina.
José Guerra, un desconocido portero a nivel internacional, fue "la figura del partido" tapando de todo hasta el 78'. En dicho minuto, perdimos la virginidad en la portería con el gol de Thiago Almada. El primer campeón del mundo de la MLS, aprovechó un rebote y los espacios. Luego, al 89', cayó el gol de un tal Lionel Messi. Fue un tiro libre imparable para cualquier guardameta del mundo. Lo del arquero del San Francisco, fue monumental.
Jorge Dely Valdés, gemelo de la leyenda Julio Dely Valdés y del finado Armando Dely Valdés —ídolo de Argentinos Juniors—, demostró ser un estratega y salió con un 1-5-4-1 para aguantar el acoso ofensivo de una plantilla valorada en 900 millones de dólares. Jorge se paró bonito con Guerra en portería; Iván Anderson por el lateral derecho; con Edgardo Fariña, Jiovany Ramos (capitán) y Richard Peralta como centrales; Kevin Galván como lateral zurdo; José Murillo e Irving Gudiño como los contenciones; Cristian Quintero y Alfredo Stephens como extremos defensivos; Ronaldo Córdoba como "el llanero solitario" en punta. Fue una primera parte de ensueño, con orden, despliegue físico y valentía. En el complemento entraron Omar Browne, VGilberto Hernández, Michael Casazola, Víctor Medina y Miguel Camargo. El equipo comenzó a desordenarse al 69'. Entendible por el anhelo de jugar.
Al final del partido, Panamá fue aplaudido y toda la Selección fue a tomarse fotos con el jugador más grande del siglo XXI: Lionel Messi. Estos guerreros hicieron un partido más digno que la Selección del 2009 (perdimos 3-1 en amistoso) y que la del 2016 (perdimos 5-0 en Copa América Centenario 2016).